«Ingenuidad y locura es seguir haciendo las cosas igual y esperar resultados diferentes, si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo»
Malos tiempos para la lírica, cantaba Germán Coppini. Y para los toreros malos, me dijo un día Pepín Liria. Pero buenos tiempos para los creativos y también para los «pescadores» de hombres. A río revuelto, ganancia de pescadores, no solo en la parcela económica, también en la intelectual.»Existe algo mucho más escaso, fino y raro que el talento. Es el talento de reconocer a los talentosos» citaba Elbert Hubbard. Es tiempo de oportunidades y cambios, muchos, movimiento continuo de tu queso. Tomás Fuertes, Presidente del Grupo Fuertes decía, «los problemas son oportunidades no resueltas». Y que razón tenía.
Para mí, tal y como están los tiempos y siguiendo un poco estas consignas, cada vez tengo más claro que para salir de esta crisis es imprescindible innovar, crear cosas nuevas o copiar y mejorar, me da igual, pero hay que hacer algo. «Ingenuidad y locura es seguir haciendo las cosas igual y esperar resultados diferentes», según Einstein: si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo. Pero no, hay algunos que esto no va con ellos, llevan tres años así y no hay quien les baje de la burra.
Cuando voy a algún Club de Golf al que hace meses que no he ido y veo que todo sigue igual en cuanto a innovación y supongo que fatal en la parcela económica, siempre me hago la misma pregunta. ¿ Por qué los propietarios de los Campos de Golf no prescinden de los que ya nada pueden aportar porque no saben o no quieren y dejan paso a los que quieren hacer algo nuevo y diferente ? Cuando se toca fondo, cualquier cambio siempre será a mejor.
¿Y que es innovar ? Pues muy sencillo, hoy he encontrado estos párrafos en parasaber.com que definen perfectamente que es innovar.
Transformar la creatividad en valor, en soluciones, que aporten beneficios a todas las partes implicadas.
Para innovar es fundamental aprender a observar el mundo, con curiosidad y perspicacia. Observar lo que el mercado está pidiendo, o lo que todavía no forma parte de su experiencia. Observar lo que nos ofrece la tecnología. Darse cuenta de que las cosas pueden hacerse de manera diferente.
Para poder innovar hay que salir del laberinto. El día a día impide ver nuevas oportunidades. Es fundamental alzarse sobre este laberinto para descubrir nuevos escenarios, ver las cosas desde fuera, para sacar partido del market push y del tecnology push. Y disponer de libertad para pensar de manera radical y rompedora.